SANTIAGO. Moradores y dirigentes comunitarios de varias secciones enclavadas en la Cordillera Septentrional de este municipio, denunciaron ayer que el ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones y la empresa a cargo de la construcción de la carretera Jacagua-Palo Alto, abandonaron la misma, sin ofrecer explicaciones.
José Bautista, Teófila Tejada y Porfirio Reynoso, hablando en nombre de los moradores de las 17 comunidades comprendidas entre Jacagua y Palo Alto, dijeron que, desde hace un mes, los equipos pesados que estaban allí trabajando fueron retirados.
“Solo nos dejaron los letreros que indican que Obras Públicas está trabajando, pero sin ningún personal”, expresó Teófila Tejada.
Indicó que existen varias versiones, entre ellas de que el Gobierno no le ha pagado a la empresa contratista, o que tampoco le han depositado al ministerio de Obras Públicas.
“Nosotros estamos muy preocupados por el abandono de estos trabajos, ya que esa carretera fue fruto de una larga lucha que libramos junto al sacerdote Ramón Ramos (Nino), Hugo Bautista Espaillat y otros dirigentes comunitarios”, expresó José Bautista.
Mientras que el agricultor Porfirio Reynoso dijo que el mal estado de la carretera impediría que decenas de cosecheros de diversos rubros agrícolas saquen sus productos a los mercados.
En esta zona se produce cacao, café, plátanos, guineos, frutas tales como limones dulces, agrios, naranjas agrias, aguacate y mangos, así como habichuelas, yuca, batata y otros rubros.
Julio César Méndez, del comité proconstrucción de la carretera, informó que ante las diferentes versiones que existen, se decidió conceder un compás de espera a las autoridades para que retomen los trabajos de la construcción de la carretera.
Dijo que los trabajos que se encuentran más atrasados son los de las canaletas, que les faltan entre un 70 y un 80 por ciento para su culminación.
“Incluso la constructora ha dicho que tiene prácticamente todo terminado en cuanto a la imprimación de la carretera”, precisó Méndez.
Esa carretera se comenzó a construir el pasado mes de abril del 2017, luego que el presidente Danilo Medina la aprobara tras reunirse con una comisión de los habitantes de las 17 comunidades, encabezados por el reverendo Ramón Ramos (Nino).
Ni el ministerio de Obras Públicas ni la empresa encargada de construir la carretera han ofrecido explicaciones de por qué se paralizaron los trabajos en la obra.
La extensión de la carretera es de 16.3 kilómetros y tiene un costo superior a los RD$70 millones.