SANTO DOMINGO.- La Procuraduría General de la República acusó al exministro de las Fuerzas Armadas, Pedro Rafael Peña Antonio, de haber manejado las “transacciones ilícitas” del soborno de US$3.5 millones que habrían otorgado ejecutivos de la empresa Brasileira de Aeronáutica S.A (Embraer) para la venta a la República Dominicana de ocho aviones Super Tucano.
Dijo que él fue la persona que dominó todo lo concerniente al proceso de compraventa, realizado en el 2007.
En la acusación, presentada a través de la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Administrativa (PEPCA), se establece que Peña Antonio se valió y asistió de su “socio y subalterno”, coronel Carlos Ramón Piccini Núñez, para que lo representara en las negociaciones ilícitas y coordinó todo lo relativo a la recepción y entrega del dinero para el soborno.
Según la acusación del Ministerio Público, entre 2006 y 2012, cuando ocupó altos cargos de administración, Peña Antonio registró un enriquecimiento patrimonial “permanente, ascendente e injustificado”.
Agrega que, conforme a la declaración jurada del 15 de septiembre de 2008, su mayor salario ascendía a RD$75,101 mensuales como secretario de las Fuerzas Armadas, cuya suma representaba RD$1,952,626 en los dos años que permaneció en el cargo.
Dice que un análisis de los productos financieros del imputado, y de su esposa, basado en informaciones de la Superintendencia de Bancos, reveló que entre el 1 de enero de 2008 y diciembre de 2016, movilizó cerca de RD$171,630,922.25 y US$283,780.03.
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