
Dajabón.-Unos consideran que es normal y otros que nos están invadiendo. Otros en cambio dicen que se trata de exageraciones o de una campaña montada.
Pero lo que nadie debate es que al caminar por pueblos próximos a la frontera la marcada presencia de haitianos es una realidad más que evidente, que año tras año cobra mayor notoriedad.
A cualquier hora se puede observar decenas de nacionales del vecino país deambulando por las calles y con la puesta del sol el número se incrementa.
Se juntan a socializar en determinados puntos en grupos de cinco, diez y en números mayores.
“¿koman ou ye?” (Cómo estás), se escucha decir a algunos cuando te le acercas, mientras otros prefieren guardar silencio.
Muchos de ellos están regularizados, pero otros viven en la ilegalidad.
Se trata de un drama humano que presiona directamente al país, ya que la mayoría ha venido en busca de una mejor vida para ellos y sus familias.
Las zonas más habitadas
Perteneciente a Montecristi, la comunidad de Los Conucos, El Ahogado, Palo Verde y otras son de las localidades en las que hay mayor presencia de haitianos.
Se puede incluir en la lista a Loma de Castañuelas, Las Matas de Santa Cruz y Gozuela.
En esta última incluso dominicanos menores de edad dominan a la perfeccíón el creole.